Son las tres de la tarde con casi treinta y cinco minutos y aquí estoy yo.... supuestamente "trabajando".
La verdad es que hoy no hay mucho que hacer, o mejor dicho, todo lo que podría haber hecho ahora lo hice en el fin de semana.
Bueno, como tantos post anteriores... "de qué hablar". Y es que este blog no es temático, pero aún así, pareciera que el tema de este blog es el no tener de qué hablar y terminar siempre hablando de algo.
A ver, a ver. Instalé el Office 2010 y a pesar que a grandes rasgos no parece muy distinto al 2007, en verdad sí lo es; y si bien el primer día me costó acostumbrarme, por no decir que me dio nostalgia abandonar Office 2007, sobretodo por lo que me costó aprender a usar la cinta de ¿"opciones"?.
La otra noticia "computina" que les puedo contar es que instalé Internet Explorer 9. Qué puedo decir, está bueno en comparación a sus versiones anteriores, pero sigo prefiriendo Chrome de Google. Se ven "casi" iguales, pero Chrome es más rápido sin duda.
De qué más hablar. ¡Ah! por supuesto, para los que no son de acá, les puedo contar que hoy llegó el otoño; sin embargo, aún hace calor, bastante calor. Sinceramente agradecería un par de días realmente feos y ojalá con lluvia.
También, para los que no son de Chile, les puedo contar que ya pasó el riesgo del tsunami. No obstante, me he dado cuenta que ando un poco ¿"paranoico"? con todo esto de los temblores y los tsunamis. El miércoles de la semana pasada estaba en Valparaíso (Chile), muy cerca del mar cuando fue el temblor de 5,3 grados Richter y me dio toda la tontera así que escapé. Ese mismo día, como a las 10 de la noche, estaba en un restaurant en Viña del Mar (Chile) que estaba en un tercer piso, cuando de repente se pone a temblar y se movía todo; si bien estaba en una reunión, agarré mis cosas y cual Marti ¿"McFly"? dije: "Ya quedemos aquí no más, mándame las cosas por mail". Confieso que no le tengo miedo a los temblores y terremotos, porque de alguna manera, aquí en Chile, hay más cultura sobre los terremotos, pero los TSUNAMIS..... son realmente algo nuevo y que en verdad a mí me asustan por los daños que producen y la imposibilidad de las personas para escapar de ellos cuando no hay la suficiente diligencia de las autoridades en avisar a la población de la posible ocurrencia de dichos fenómenos.
Y así las cosas, ya son las tres con cincuenta y nueve minutos y es mejor que me ponga a "trabajar". El punto es que no sé en qué.... tengo todo hecho.
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