Yo quería un computador

Corría el año 1995 y yo empecé a querer un computador. En el año 1996, mis padres, al fin, y después que entendieron que no era sólo un juguete hicieron el esfuerzo de comprarme un Epson Action PC 5600 con un procesador Pentium de 75 Mhz, 16 MB de memoria RAM, 1 MB de video y un disco duro de 1.2 GB y Windows 95. Ese computador salió extremadamente bueno, ya que hasta hoy funciona y mi papá lo usa para escribir, además de usar un traductor que funciona en ese computador.  
Sin embargo, el peregrinar para llegar a ese computador no fue fácil. Si bien en esa época era más fácil decidirse por algo, ya que no había tanta variedad entre notebook, netbook o desktop; había otro problema: la falta de información. ¿Qué computador comprar? ¿Cuál era mejor? En esa época ya se había instalado la batalla entre los procesadores Intel y AMD.
Bueno, averiguando por aquí y por allá, entre tanta cotización, no pudieron estar exentos de los ojos de mis padres y de los míos los computadores de Apple, que en ese tiempo se llamaban Macintosh. Tenían fama de buenos, potentes y que iban por delante de lo que se conocía como PCs compatibles, sin embargo el gran problema era el precio.
Pensando en esto, recordé que tenía un catalogo de Apple de esos tiempos y decidí escanearlo y mostrártelo a ti (te advierto sí que las imágenes no quedaron perfectas, pero hice lo que pude para que calzaran).